Renuncio a las pretenciones, a la admiración, al desprecio, a las malas artes que acaban por convertirse en amistad. Renuncio a todo ello. El blog, que antes era el paño donde llorar o el espejo donde hacía caritas, será algo más dinámico (como se dice ahora) más variado y más divertido. Renuncio a la impertinencia, a la prepotencia y a las cosas malas que terminen en -encia. Por eso, no solo será de "poetas anónimos", sino también de humor y crítica. Volcaré mis ocurrencias y opiniones en este blog. Renuncio a la crítica gratuita, a las bromas pesadas y a hacerme el patético. Renuncio a esto y a muchas más cosas. No borraré lo anterior porque me gusta conservarlo como vestigio. Para los momentos de aburrimiento en los que la añoranza se hace más patente. Renuncio a gustar y querer gustar.
El beso
Cuando la virtud deja de existir...
Desde que el hombre miente...
Hay personas que no creen en la existencia de las Verdades Absolutas, pero, en cambio, de las Falsedades Universales nadie duda....
Estoy aquí y me siento tan raro. Veo gente que no he visto nunca, que no he imaginado en mi vida, y pienso que los conozco, o al menos que debo interponerme en sus caminos y descubrir que ven, que miran, que hacen y adonde van. Es todo tan frío que quema.
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